Tenemos miedo, todos, por no saber lo que viene después, por querer ir echados para adelante, pero tu cuerpo te lo dice, cuidado que la vida es muy cabrona. Pero hay que tomar decisiones, tus propias decisiones, los demás no saben lo que quieres y pretenderán tomarlas por ti, no te dejes, permítete sentir el miedo, el miedo que da decir las cosas como son, como te gustarían. Vas a encontrarte con mucha gente en esta vida, personas que merezcan la pena, y otras un poco más putas. No puedes cambiar por todos ellos, tienes que ser tú, gritar si lo necesitas, llorar, lo que sea, pero no te escondas, enséñale al mundo que puedes ser feliz.

- Solíamos hablar de nuestro futuro, de lo perfecto que sería, ¿Recuerdas?
- Sí
- ¿Qué ha pasado? ¿Cuándo se fastidió todo?...Esto no es lo que tenía que pasar, ya no se quien soy, ni qué se supone que debo hacer. Me siento tan...
- ¿Perdida? ¿Recuerdas cuando me hacías ver una y otra vez tus películas favoritas?... Me volvías loco
- ¿Eso es una frase de ánimo?
- Y por fin te pregunté por qué te gustaba ver películas que ya habías visto, y ¿recuerdas lo que me dijiste?
- Me gusta saber cómo van a acabar las cosas...
- Exactamente.

No lo dejes para después, tampoco lo vayas a hacer antes de tiempo, todas las cosas tienen su momento, busca ese momento exacto, ese punto, donde convergen los sueños, donde converge lo nuestro, donde convergemos